19.5.20
Hablar con Dios, Tomo 2 N° 78, Autor: Francisco Fernández Carvajal
El hombre, en el momento del Bautismo, es transformado en lo más profundo de su ser, de tal modo que se trata de una nueva generación, que nos hace hijos de Dios, hermanos de Cristo, miembros de su cuerpo, que es la Iglesia. Esta vida es eterna, si no la perdemos por el pecado mortal. La muerte ya no tiene verdadero poder sobre quien la posea, que no morirá para siempre; cambiará de casa, para ir a morar definitivamente en el Cielo.
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