30.6.17

Carta de San Pablo a los Romanos, 14,17

Que el Reino de Dios no es comida ni bebida, sino justicia y paz y gozo en el Espíritu Santo.

La Palabra Para Ser Hablada, Capítulo 12; Autora: Santa Teresa de Calcuta

La alegría es una necesidad y una fuerza para nosotros, también psíquicamente. Una hermana que cultiva el espíritu de alegría siente menos la fatiga y está cada día dispuesta a hacer el bien. Una hermana rebosante de alegría predica sin predicar. Una hermana alegre es como el rayo de sol del amor de Dios, la esperanza de la alegría eterna, la llama de un amor ardiente.
La alegría es una de las mejores garantías contra la tentación. El diablo es portador de temor y barro, toda ocasión para lanzárnoslo es buena para él. Un corazón alegre sabe cómo se ha de proteger.