8.5.14

La Palabra Para Ser Hablada, Capítulo 6; Autora: Beata Teresa de Calcuta


¿Dónde encontráis la alegría de amar? En la eucaristía, la santa comunión. Jesús mismo se hizo "pan de vida" para darnos vida. Noche y día está allí. Si vosotros realmente queréis crecer en el amor, volved a la eucaristía, a esta adoración. En nuestra congregación, teníamos la costumbre de tener la adoración una vez a la semana durante una hora; después, en 1973, decidimos tener la adoración cada día durante una hora. Tenemos mucho trabajo; por todas partes nuestras casas para enfermos y moribundos indigentes están llenas. Pero a partir del momento en que comenzamos la adoración cada día, nuestro amor por Jesús se volvió más íntimo, nuestro amor por cada uno más benévolo, nuestro amor por los pobres más compasivo. 



Mirad el tabernáculo y ved lo que significa ahora este amor. ¿Soy consciente de eso? ¿Mi corazón es lo bastante puro para que vea allí a Jesús? Con el fin de que para vosotros y para mí sea más fácil ver a Jesús, él mismo se hizo "pan de vida"; con el fin de que pudiéramos recibir la vida, una vida de paz, una vida de alegría. Encontrad a Jesús y encontraréis la paz.