21.8.06

Evangelio según San Juan 6, 53-58

"Les aseguro que si no comen la carne del Hijo del hombre y no beben su sangre, no tendrán Vida en ustedes. El que come mi carne y bebe mi sangre tiene Vida eterna, y yo lo resucitaré en el último día. Porque mi carne es la verdadera comida y mi sangre, la verdadera bebida. El que come mi carne y bebe mi sangre permanece en mí y yo en él. Así como yo, que he sido enviado por el Padre que tiene Vida, vivo por el Padre, de la misma manera, el que me come vivirá por mí. Este es el pan bajado del cielo; no como el que comieron sus padres y murieron. El que coma de este pan vivirá eternamente".

1 comentario:

Anónimo dijo...

...ojalá poco a poco nos demos cuenta del verdadero camino de vida, que es el que mas cuesta, y no nos dejemos llevar únicamente por lo mas fácil, ya que solo trae alegrías pasajeras...